¨El Contrahierbas, también conocido como Contrayerba, es un macizo nevado con varios picos: Yanarraju (5435msnm), Camchas (5204 msnm), Cajavilca (5409 msnm), Garhuanga y Contrahierbas que forma parte de los Andes peruanos en el sector Cordillera Blanca . Su extensión comprende las provincias de Asunción, Carhuaz y Yungay. Alcanza su máxima elevación en la cima sur con 5.956, ubicada en la Provincia de Yungay en el Departamento de Ancash, Perú.¨ (http://www.wikiwand.com/es/Contrahierbas).
Con
lo que odio madrugar, a las tres de la mañana ya nos estaban despertando. Teníamos
que desplazarnos hasta un punto denominado Punta Olímpica (4 735 m.s.n.m.) definido
en wikipedia como “un paso vehicular trasandino, de alta
montaña, que enlaza las subregiones
geográficas del Callejón de Huaylas y la Zona de Conchucos. Se encuentra
situado en la divisoria de aguas continental, atravesando el
pico Punta Olímpica del nevado Ulta en el sector
montañoso Cordillera Blanca entre las provincias de Asunción y Carhuaz de
la región peruana de Ancash”
Luego
de tres horas de viaje y siendo aproximadamente la seis de la mañana, estábamos
en el punto de partida con los amigos del grupo Xtrek, organizadores de la
escalada al Nevado Mateo, uno de los picos nevados de la cadena montañosa
llamado Contrahierbas en la Cordillera Blanca, dentro de los límites del Parque
Nacional Huascarán, en la quebrada Ulta dentro de la provincia de Carhuaz.
Ya
con el equipo cargado a nuestras espaldas: Botas, picota, crampones, arnés; y poco antes de las siete de la mañana damos
inicio a la caminata de aproximación hasta el inicio del glaciar en
aproximadamente dos horas a paso lento pero seguro, hasta alcanzar con mucho
esfuerzo el límite de la morrena con la glaciar en donde procedemos a
equiparnos para la ascensión y formar las cordadas en este caso de a tres
personas. En esta ocasión tuve el honor de ir encordado con Jelly Ocaña y
Kathiuska Barrio.
El
día nos toco nublado, cuestión de suerte básicamente, pero igual nos dimos el
gusto de escalar y de tocar una vez mas las alturas, de proponernos un reto y
una meta, de encontrarnos con nosotros mismos y de sentirnos pequeños, una vez
mas, frente a la inmensidad de las montañas para encontrar una vez mas la
respuesta a la pregunta ¿por qué escalar montañas?, siendo la mejor respuesta
curiosamente la mas sencilla, la de George Mallory, uno de los más grandes
escaladores de principios del siglo pasado: “Porque están ahí”. Ante
tamaña belleza natural, salvaje y primigenia, surge el inevitable deseo de
escalarlas del ser humano, esa curiosidad insaciable que caracteriza que nos ha
impulsado desde tiempos milenarios a surcar
mares, perderse en selvas y llanuras, y como no, escalar montañas.
linda cronica, y muy inspiradora conclusion, no habia oido hablar de George Mallory pero es cierto.
ResponderEliminarexcelente trabajo como siempre Renzo Miranda.